España asume la presidencia del Grupo de Donantes de Ayuda Humanitaria de Naciones Unidas, mientras amenaza a la ONG Open Arms con multas de más de 900.000 euros si rescata a personas en el Mediterráneo y ofrece a Marruecos 26 millones para el control de la frontera.

El compromiso de España con los derechos humanos en el mundo cojea tanto en forma como en fondos. El Informe la Realidad de la Ayuda, de Oxfam Intermón, denuncia que España es líder absoluto en recortes a la ayuda internacional en la última década y que destina menos fondos en la actualidad que en 1990.

Europa hace lo propio en materia de migración donde está escribiendo páginas infames. El caso de la capitana Carola Rackete ha abierto los noticieros de estos días; a pesar de parecer una excepción, el caso de Rackete es uno más de muchos. 158 personas han sido procesadas en la UE por ayudar a personas migrantes desde 2015. La persecución de quienes defienden y protegen la vida no ha supuesto un freno a sus actuaciones, todo lo contrario, en los últimos días, varios barcos de rescate, que habían parado sus actividades siguiendo las restricciones de los gobiernos, se han rebelado y han retomado los rescates.

Y mientras Europa mantiene acuerdos con terceros países para contener los flujos migratorios (y con ello, restringir el derecho a migrar), continúan llegando noticias sobre flagrantes violaciones de derechos humanos en esos países. Esta semana se produjo un bombardeo a un centro de migrantes en Libia; no se tiene certeza de cuántas personas fueron asesinadas, pero la ONU apunta a más de 53 y 130 heridas. Naciones Unidas ya ha calificado este ataque como “posible crimen de guerra”. En todo el mundo, desde 2014, y según cifras oficiales, más de 32.000 personas han muerto, entre ellas casi 1.600 niños y niñas.

Esta entrevista a Sara Prestianni, investigadora de ARCI y Migreurop, analiza con detalle los tejemanejes de la Unión Europea en materia de militarización de fronteras y desvíos de fondos de cooperación para el control migratorio. Prestianni explica con claridad cómo se están utilizando los fondos fiduciarios y qué hay detrás del Plan África del gobierno español. 

Tratados comerciales que atentan contra la vida

Una de las cuestiones que ha pasado de puntillas por la actualidad de esta semana ha sido la firma de un acuerdo comercial de la Unión Europea con Mercosur, tras 20 años de negociaciones. Según el análisis realizado por la campaña No al TTIP, se trata de “uno de los acuerdos más peligrosos” (…) “es el equivalente a cuatro veces el CETA firmado con Canadá, tendrá un impacto negativo incalculable sobre la crisis climática y debilitará los derechos de las personas frente a los de las corporaciones”. Un tratado que supondrá un ahorro para la UE y un expolio para Sudamérica.

La apuesta por las grandes corporaciones en detrimento de los derechos humanos y medioambientales, está poniendo en el ojo de mira a quienes defienden la tierra. Las amenazas, y asesinatos de mujeres ambientalistas están incrementando. Son mujeres que defiende la tierra, el agua, las montañas y una forma de vida contraria al capitalismo. Una de estas mujeres es la colombiana Maricel Sandoval, quien está en España en el programa Madrid acoge; Sandoval denuncia los hostigamientos a los que son sometidas y exige protección a las víctimas.

El sistema económico capitalista, que tanto tiene que ver con estas situaciones, ha alcanzado los límites ecológicos del planeta. Según Luis González Reyes, de Ecologistas en Acción, el crecimiento económico del que depende el sistema va a detenerse, independientemente de las medidas que se tomen. Eso sí, podemos elegir que ese escenario postcrecimiento sea organizado y justo, evitando que la desigualdad siga siendo el motor de la sociedad.

Acabamos el resumen de prensa de esta semana con este reportaje realizado por Cooperacció, La Directa, El Salto y Píkara sobre las mujeres que migran desde sus países a España. El reportaje se pregunta ¿Quién sostiene la vida cuando las mujeres migran?